La ministra de Interior, Carolina Tohá, y el ministro de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Jaime de Aguirre, encabezaron el lanzamiento de “Árboles por la Memoria”. El proyecto forma parte de las actividades de Conmemoración de los 50 años del golpe de Estado.
La iniciativa permitirá la plantación de árboles nativos en sitios de memoria y espacios públicos y privados en las 16 regiones del país, como recuerdo y homenaje a las víctimas de la dictadura.
“Estos árboles son nuestros votos por la democracia y por la vida. Votos que se deben renovar todos los días en democracia, porque el monstruo que llevamos dentro está siempre ahí y necesitamos domarlo y mantenerlo a raya”, señaló Tohá.
Además, agregó que “estos árboles serán nuestro recordatorio vivo del compromiso que hacemos cuando nosotros decimos nunca más, y, especialmente cuando decimos que quisiéramos convertir ese nunca más en una consigna nacional que vaya más allá de nosotros. Que sea de toda la sociedad chilena, que convoque a todos los sectores, sin exclusión, y a todas las personas”.
Por su parte, Jaime de Aguirre manifestó que “soy de los que piensa que las cicatrices no desaparecen nunca, se administran en el cuerpo para ser conscientes de aquello y nos permiten pensar y proyectar un futuro mejor. La invitación es a reflexionar para que nunca más en Chile ocurra algo similar”.
La plantación comenzó en el ex Centro de Detención 3 y 4 Álamos, en la comuna de San Joaquín, donde se plantaron 20 árboles de especies nativas. El proyecto se ejecutará hasta el 29 de agosto a lo largo de todo el país, día previo de la conmemoración del Día Nacional e Internacional del Detenido Desaparecido (30 de agosto).
Las especies arbóreas propias de cada región serán donadas por la Corporación Nacional Forestal (Conaf), entre las que se cuentan avellanos, pataguas, canelos, laureles, pimientos, boldos, algarrobos, lavandas y otras. En total se plantarán 2.085 árboles en todo el territorio nacional.