El ministro del Interior (s), Manuel Monsalve, junto al director nacional de SERMIG, Luis Eduardo Thayer, y el prefecto Ernesto León, jefe de Migraciones y Policía Internacional, realizaron un balance del proceso de empadronamiento biométrico.
Este jueves, Monsalve explicó que el principal objetivo de este sistema, es que el país “conozca las identidades y pueda identificar a las personas que están en su territorio”.
“Un país no puede aspirar a garantizar seguridad a los ciudadanos que están en su territorio si no tiene la identidad de los ciudadanos que están al interior su territorio”, acotó la autoridad.
En esta línea, informó que 130 mil personas se autodenunciaron ante la Policía de Investigaciones, de las cuales 113 mil ingresaron a Chile antes de 2023.
De esta forma, 194 mil extranjeros se inscribieron en el empadronamiento y 105 mil finalizaron el proceso, es decir, entregaron huellas, fotos y dirección de domicilio.
El director nacional del Servicio Nacional de Migraciones, Luis Eduardo Thayer, sostuvo que una “mejor política migratoria le hace bien al país. La evaluación del proceso de empadronamiento biométrico es buena en términos de los resultados”.
“Ha sido exitosa hasta ahora. Se extiende hasta diciembre este proceso. Y es buena también en la capacidad que hemos demostrado de trabajar coordinada y colaborativamente las distintas instituciones”, agregó.
Por su parte, el prefecto Arias comentó que el 40% de las personas empadronadas son de la Región Metropolitana. Además, en las regiones de Aysén, Magallanes, Arica y Los Ríos el proceso se encuentra finalizado, lo que significa que quienes “se inscribieron acudieron a finalizar el proceso”.
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