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El exfuncionario de Carabineros Sebastián Zamora se emocionó al declarar en el juicio oral en su contra por el delito de homicidio frustrado.

El expolicía es acusado de lanzar desde el puente Pío Nono a un menor de edad en medio de manifestaciones en el contexto de estallido social y desde la Fiscalía piden una pena de ocho años de cárcel.

En su relato ante el tribunal, el excarabinero habló, entre lágrimas, de los dichos que dijo en el momento del hecho y que quedaron registrados en la cámara. Zamora aseguró que "no era un ‘lo maté' de celebración, fue de urgido, de pena".

También aseveró que había sido amenazado por redes sociales. "Me comenzaron a llegar muchas amenazas por redes sociales, por mi número de WhatsApp, incluso, amigos míos que yo tuve casi toda mi vida", expresó.

En su testimonio, Zamora explicó que fue el teniente Murillo quien dio la orden de arremeter contra los manifestantes. "Da la orden. Yo corro velozmente, cambio mi mirada al poniente y veo a una persona que había visto minutos atrás golpeando un carro policial con un objeto tipo lanza", relató, refiriéndose al joven que minutos después caería al río Mapocho.

"Me dirijo directamente hacia él a toda velocidad (...) con el bastón isométrico en el brazo derecho extendido a la altura de sus hombros y el brazo izquierdo a la altura de su cintura. Mi intención era abrir los brazos, abrazarlo y derribar a la persona para detenerla", continuó.