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Fiscalía descartó que se tratase de una "mexicana" el procedimiento realizado por Carabineros en una vivienda el sector Belloto Sur, en donde fue asesinada la sargento Rita Olivares.

Esta hipótesis se instaló luego que la fiscal jefe de Quilpué, Mónica Arancibia, indicara en la audiencia de imputación de cargos que el coimputado Luis Martínez Conde Riesco había comentado que él junto al resto de individuos se habrían dirigido a esta casa porque al interior habrían cerca de 100 kilos de marihuana y que debido a que no encontraron esta sustancia, comenzaron a robar especies.

En conversación con La Tercera, la persecutora Arancibia descartó que existan antecedentes respecto a una "quitada de droga" y aclaró que ese domingo "Carabineros concurrió al lugar alertados por una vecina que llamó dando cuenta que en esos momentos se estaba cometiendo un robo en un lugar habitado. Ante esa situación y la peligrosidad que reviste este tipo de delitos para los moradores del domicilio, la policía concurre raudamente y es en esos momentos que se produce el procedimiento con los lamentables resultados que ya se conocen".

"La alerta de la vecina es respecto de un robo. Quien señala que habrían ido a robar droga es el coimputado Luis Vicente Martínez Conde Riesco, pero en el lugar del hecho no hubo hallazgo de drogas y lo que se llevaron, son joyas, dinero y llaves de una camioneta", agregó.

Respecto a sus declaraciones en la audiencia, indicó que "es la declaración del coimputado y hay un número de mensajes transcrito, donde en uno de ellos se hacía la mención de la quitada de droga. Pero es la versión de los imputados".

En ese sentido, sostuvo que "la verdad es que las víctimas, el trabajador que estaba ahí da cuenta que cuando es llevado por sujetos que lo intimidaban, ve como los dueños de casa eran reducidos. El dueño de casa, incluso, relata que lo que le exigen es dinero y droga, pero él les explica que él es comerciante".

Según los antecedentes del caso, los policías acudieron luego de una denuncia por robo en una casa en calle Río Toltén.

Los ladrones llegaron armados y en dos grupos a cometer el asalto, maniatando a los cinco moradores. Sin embargo, al ver la presencia policial los delincuentes intentaron darse a la fuga por la parte trasera del inmueble, donde tenían un vehículo de apoyo.

Durante su escape, la banda criminal realizó cerca de 30 balazos en contra de Carabineros, uno de los cuales impactó a la altura del oído derecho de Olivares, causando su muerte.