Cultura

Si bien esta no es la primera vez que Francisca pisa el escenario del Movistar Arena - recordemos que estuvo presente en el listado de artistas del festival de aniversario de la mítica radio de música chilena “Radio Uno” en el año 2013 - si es su primer show solista en el reconocido espacio capitalino y su estilo actual dista mucho de lo que pudimos ver en esa oportunidad.

Por esto, la noche del viernes fue particularmente emocionante para sus fans, quienes pudieron disfrutar de un show marcado por los más recientes hits de la artista, como también un recorrido por su icónico pasado.

Abrió su show pasadas las 21:00 horas sentada frente a un brillante piano fucsia, vestida con un llamativo traje azul e interpretando “Castillo de Cristal”, single de su último álbum.  Después de eso le regaló a su público un especial vestigio de su época pasada tocando “Qué sería”, de su álbum “Buen Soldado” del año 2011. 

El repertorio fue extenso, interpretó más de 28 canciones en un espectáculo de casi tres horas, en las que la atención recaía en el grupo de bailarinas y bailarines que la acompañaron en la performance, una banda en vivo multidisciplinaria y juegos de luces que combinaban con los tonos cálidos y fríos que habitaban el vestuario, los instrumentos, las proyecciones y el lenguaje estético de la artista. 

Avanzado el concierto, Francisca cambió de vestuario a un traje negro brillante de dos piezas mientras cantaba “Quiero verte más”, asistida por sus bailarinas, dando cuenta de su habilidad multifácetica al poder cantar y cambiarse de ropa al mismo tiempo, detrás de una instalación que la tapaba con una tela negra arriba del escenario.

Los momentos en que Francisca interactuaba con su público eran íntimas, amables, llenas de gratitud y cariño, reflexiones entre las cuales se refirió a la emoción de estar en el Movistar Arena, siendo una artista chilena, y ver a tantas personas que la acompañaron con ovaciones y admiración, palabras entre las que también se escapaban lágrimas de emoción.

El show contó con varios invitados especiales, primero se subió al escenario Abel Pintos, cantante argentino - quién acorde a lo que narraba Francisca al momento de presentarlo, “Viajó a nuestro país solamente para estar con nosotros esta noche”- y en conjunto cantaron “Abrazándonos”, single de bachata que estrenaron este año.

Estuvo presente también Noah Blanco, cantante chileno quién compartió un momento íntimo con la artista interpretando “Insulto” y  Dulce y Agraz acompañando con “En mi memoria”, otra de las canciones antiguas del álbum “Buen Soldado”.

Acercándose al final de la noche y después de escuchar un setlist conformado por singles lentos con relatos íntimos y románticos, como también otros más movidos y muy coreados, llegamos a una de las mayores sorpresas de la noche, que fue al momento de escuchar “Normal Mujer”- single perteneciente al álbum de la artista bajo el mismo nombre del año 2020, hecho en plena pandemia- puesto que compartió el escenario con las queridas artistas nacionales Nicole y Princesa Alba, un momento especial para la fanaticada que gritó emocionada al ver reunidas a estas tres grandes cantantes. 

Para cerrar, la artista dedicó unas palabras refiriéndose a los inicios de su carrera, una época en que era muy diferente a lo que pudimos ver esa noche - tanto en lo que son sus líricas, composición, performance y puesta en escena- al introducir la canción “Peces”, contando que esa fue la primera canción que la llevó a la radio, a poder ser escuchada, y que la interpretaba como una dedicatoria cariñosa y nostálgica “A la Fran del pasado”. 

Casi siendo medianoche la artista se despidió del Movistar sellando una emotiva y completa jornada con la canción “La Fortaleza”, recibiendo los aplausos y ovaciones de su querido público.