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En el aniversario número 120 del nacimiento de Pablo Neruda, el mundo celebra la vida y obra de un poeta.  Nacido en 1904 en Parral, Chile, dejó un legado literario que perdura hasta el día de hoy. El nacional también logró una hazaña política que dio la vuelta al mundo.

Mucho antes de ganar el Premio Nobel de Literatura, el poeta chileno Pablo Neruda cambió el destino de unos 2.300 españoles que sobrevivían, recién terminada la cruenta guerra civil, en campos de refugiados en Francia.

En 1939, el entonces presidente de Chile, Pedro Aguirre Cerda, lo envió a París como cónsul para la inmigración española. Desde Francia hizo posible que exiliados españoles llegaran a Chile el 2 de septiembre a bordo del buque "Winnipeg". 

Sería su primera acción política, algo que lo marcó profundamente. "Que la crítica borre toda mi poesía, si le parece. Pero este poema, que hoy recuerdo, no podrá borrarlo nadie", escribió Pablo Neruda sobre este hecho años después.

"Neruda siempre se preocupó por los más desvalidos y el espectáculo lamentable de la España bombardeada lo conmovió tremendamente. La destrucción de ese mundo fue una tragedia", indicó A DW Noticias el escritor Darío Oses, director de la biblioteca de la Fundación Neruda.

Cómo surgió la hazaña 

A pesar de que el buque era un viejo carguero francés, fue adaptado para acomodar a los de 2200 refugiados españoles. Esta modificación, fue llevada entre los meses de junio y julio de 1939 en los astilleros de El Havre.

Como Cónsul Delegado para la Inmigración Española, Neruda participó activamente en la organización de la travesía del Winnipeg, como reunir a las familias separadas por la guerra. Además de la colaboración de sus amigos escritores artistas, lo ayuda su esposa Delia del Carril.

Neruda también pasó por Buenos Aires, Rosario y Montevideo, ciudades en las se sumó gente para el financiamiento de esta empresa migratoria, que logró traer a los más de dos mil españoles a Chile.