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¿Dos gatos son mejores que uno? En qué factores hay que fijarse antes de adoptar un nuevo felino

Paula Bravo Arredondo, médica veterinaria, y Viviana Valenzuela, directora de la Comisión Nacional de Tenencia Responsable del Colmevet, revelaron la relevancia del proceso de adaptación y plantearon que es clave considerar la edad, temperamento y forma de vida de tu gato antes de sumar una nueva mascota.

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  • Felipe Correa Olivares

  • Jueves 4 de diciembre de 2025 - 15:04

Entre los amantes de los felinos existe la creencia de que, si un gato vive solo, la mejor solución es traerle un compañero. Pero, ¿Es realmente mejor que convivan dos en vez de uno en el hogar?

Paula Bravo Arredondo, médica veterinaria y encargada del área de control de animales domésticos y de plagas del departamento de Campus de la Usach, señaló a Diario Usach que, aunque se suele pensar a los gatos como animales solitarios e independientes, estos animales también pueden necesitar de compañía cuando sus dueños no están en casa.
La profesional planteó que, ante el deseo de los dueños de sumar un hermanito felino, para que los peludos de cuatro patas no estén extensas horas de forma solitaria, lo fundamental es evaluar caso a caso, considerando tanto factores asociados al animal que recibe y al animal que llega, como al contexto en donde se quiere que habiten en comunidad.
"Por ejemplo, un gato joven, con energía y sociable, que pasa muchas horas al día solo, recibirá con poca dificultad a un nuevo gato, sobre todo si este es también joven y/o sociable y juguetón. Por el contrario, a un gato viejo y dormilón, acostumbrado a vivir solo, le costará mucho más aceptar a otro gato en casa, sobre todo si es muy joven y enérgico, y quizás se más aconsejable que viva solo", detalló.
En tanto, Viviana Valenzuela, directora de la Comisión Nacional de Tenencia Responsable de Mascotas del Colegio Médico Veterinario de Chile  (Colmevet), complementó lo dicho por Paula Bravo y afirmó que "aunque existe la creencia de que los gatos son animales solitarios, la evidencia etológica indica que son sociales de forma facultativa y pueden beneficiarse de la compañía cuando las condiciones lo permiten”.

SENSIBLES A LOS CAMBIOS
Aunque tienen mala fama de ariscos, los felinos no son tan irritables como se piensa.  La médica veterinaria comentó que "hay algunos gatos que tienden a generar vínculos estrechos con otros de su especie, incluso con individuos de otras especies, como perros. Mientras que algunos son más solitarios y, aún compartiendo el mismo ambiente con otro animal, tienden a mantenerse en su individualidad".
Aunque la imagen de dos gatos acurrucados resulta muy tierna, la convivencia entre felinos no surge de forma automática, sino que requiere un proceso delicado de adaptación y, en determinados casos, puede ser una fuente de estrés.
Según explicó la médica veterinaria los estos peludos animales "son, en general, bastante sensibles a los cambios; cualquier mínima alteración de su cotidianeidad puede generarles ansiedad y/o estrés. Desde esta perspectiva, la llegada de un segundo gato es un cambio importante para su vida, sobre todo si son gatos adultos acostumbrados a vivir solos. Por otra parte, es crucial tener en cuenta que esta es una especie bastante territorial, por lo que la llegada de un nuevo gato al hogar puede ser difícil de aceptar".
Es por esta razón que los dueños, según lo que indicó la académica Usach, deben entender que antes de pensar en juntar dos gatos, es muy importante tomar en cuenta algunos factores como edad, temperamento, forma de vida (si es indoor o outdoor) y tiempo que ha vivido siendo el único gato de la casa.
"Así, gatos adultos o viejos que han vivido varios años solos, tenderán a tener más dificultades para aceptar a otro gato que individuos jóvenes, enérgicos y que han llegado hace poco al hogar. En concordancia, gatos que viven juntos desde sus primeros meses, aceptarán mejor la compañía del otro, pudiendo generar vínculos profundos entre sí".
Aunque los felinos mayores pueden estar más reacios, algunos sí pueden acceder a compartir su espacio. "Algunos estudios han determinado que gatos que viven exclusivamente en interior tienden a tener mejores relaciones con otros individuos, ya sea de su propia especie o de otra. Entonces, considerando todo lo anterior, puede que en algunos casos sea mejor que un gato viva solo y, en otros, la compañía puede ser algo favorable. Es caso a caso", aseguró Paula Bravo.

DISMINUCIÓN DEL ESTRÉS

Muchos dueños piensan que la compañía mutua de los gatos ayudaría a disminuir el estrés por privación social, la ansiedad o conductas destructivas o indeseadas. La directora de la Comisión Nacional de Tenencia Responsable del Colmevet explicó que efectivamente "en muchos casos, la compañía felina actúa como una terapia natural contra el estrés”.

Un compañero compatible puede aportar con juego social, apoyo emocional, aprendizaje por imitación, prevención del aburrimiento, ansiedad y entrega un mayor bienestar emocional general. 

Viviana Valenzuela comentó que una buena opción para tener dos gatos es adoptarlos juntos, sean hermanos o dos gatos que ya estén socializados entre sí, ya que estos tendrán una relación establecida, lo que les permitirá jugar a un nivel de energía similar y entre ellos se disminuyen el nivel de estrés de la transición a un nuevo hogar. 

LA PRESENTACIÓN, CLAVE PARA LOS VÍNCULOS

Un punto muy relevante al pensar en un nuevo gato es cómo se ejecuta el proceso de presentarlos; la forma en que se da ese primer acercamiento puede determinar la real posibilidad de que compartan un mismo techo.

"Es súper importante la manera de presentarlos, aunque esto no asegura que generen un vínculo estrecho, pero si puede permitir que convivan de forma armónica, sin ser una molestia el uno para el otro", detalló Bravo.

Si está el deseo de sumar un nuevo miembro al hogar, con una dinámica ya establecida entre mascota y dueño, lo recomendable es ver la compatibilidad que pudieran tener los animales. 

“Puede ser beneficioso sólo si existe compatibilidad. Los gatos seniors suelen tener menos energía y rutinas bien establecidas, por lo que un compañero tranquilo y compatible puede brindar compañía sin generar estrés. Sin embargo, un gatito muy activo, no es recomendado, pues puede terminar acosando al gato mayor, deteriorando su calidad de vida”, aseguró Viviana Valenzuela.

Con estos lineamientos claros, es vital la presentación. Paula Bravo Arredondo planteó que nunca se debe presentarlos libremente y de golpe. "El acercamiento debe ser progresivo; tenerlos, inicialmente, en espacios contiguos pero separados, con el fin de que puedan saber de la existencia del otro, pero no tocarse; colocar objetos de uno en el espacio del otro, para que puedan ir reconociendo su olor; luego de un par de días, permitirles reconocerse a través de un vidrio o reja, pero que el contacto físico aún sea bajo o nulo; colocar feromonas en el ambiente ayuda mucho a bajar el estrés durante este proceso", comentó.

La médica veterinaria agregó que "las primeras interacciones directas deben estar mediadas por sus humanos responsables y, si se genera algún altercado, la recomendación es retroceder un paso en el proceso, y volver a intentar. Es importante también evitar hablar o tocarlos mientras están en este proceso de reconocimiento".

En tanto, la directora de la Comisión Nacional de Tenencia Responsable del Colmevet aseguró que es recomendable hacerlo en cuatro etapas, las cuales pueden durar semanas o meses.

Fase 1, Aislamiento: Nuevo gato en una habitación segura con recursos propios. Uso de feromonas.

Fase 2, Habitualización olfativa: Intercambio de mantas, camas, olores.

Fase 3, Contracondicionamiento: Alimentación simultánea a ambos lados de la puerta.

Fase 4, Interacción controlada: Encuentros breves, supervisados, con barrera física.

Si aparece tensión, se retrocede una fase.

Tener más de un animal es una responsabilidad mayor, por eso Viviana Valenzuela enfatiza “solo es recomendable si el tutor puede cumplir todos los requisitos para garantizar una convivencia positiva”, concluyó.

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