El pasado domingo, fue encontrado el cuerpo de una mujer, atado de pies y manos, al interior de una casa abandonada en la comuna de Calama. Se trata de Javiera Rojas, una activista medioambiental, reconocida en la zona por su lucha contra la instalación de la termoeléctrica de PRIME y contra el embalse de la Tranca.
Al respecto, Francisca Fernández Droguett, integrante del Movimiento por el Agua y los Territorios-MAT, señaló: “Estamos ante un feminicidio y ya hay antecedentes de participación de terceros. Se maneja que habría dos hombres detenidos, uno de ellos con una vinculación amorosa con ella”.
Fernández detalló que Javiera, tras años de activismo en Combarbalá, “volvió a vivir a Calama donde trabajaba con personas en situación de calle y es un territorio de complejidad donde hay extractivismo y narcotráfico”. Y apuntó que “los lugares de despojo y explotación a la naturaleza suelen ser proclives a la violencia hacia las mujeres y niñas”.
“Estamos entristecidos del horror que nos vuelve a tocar ya que estamos en una lógica de explotación y violencia a las mujeres en nuestro país más la muerte de compañeras que han defendido nuestros territorios”, reflexionó.
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