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Esta tarde, un grupo de parlamentarios oficialistas presentaron un proyecto de ley que busca modificar el artículo 60, inciso ocho, de la Constitución, permitiendo cesar del cargo a los diputados o senadores que ejerzan actos de violencia dentro de sus funciones.

La propuesta fue presentada tras el escándalo ocurrido el día de ayer en el Congreso, donde Gonzalo De la Carrera agredió con un golpe de puño al vicepresidente de la Cámara, Alexis Sepúlveda.

Ante el hecho, se comenzó la discusión sobre si es posible desvincular a un parlamentario de su cargo en este tipo de circunstancias, ya que hasta la fecha no existen alternativas para establecer una salida si alguno de los legisladores ejecuta hechos violentos.

Es por esto, que la bancada del Partido Socialista, junto a la diputada comunista, Carmen Hertz, y el humanista Hernán Palma, presentaron una iniciativa para modificar el artículo 60, inciso 8 de la Constitución, que señala que "los diputados y senadores podrán renunciar a sus cargos cuando les afecte una enfermedad grave que les impida desempeñarse y así lo califique el Tribunal Constitucional".

En este sentido, el proyecto de la modificación plantea que "cesará en el cargo el diputado o senador, que durante su ejercicio, ejerciere actos de violencia contra las personas o respecto de sus colegas en el desarrollo de sus funciones".