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El Tribunal Oral en lo Penal de Viña del Mar dejó en libertad vigilada a los dos funcionarios de Carabineros declarados culpables de realizar disparos injustificados contra quienes se manifestaban durante el estallido social. 

Según los antecedentes del caso, el 22 de octubre del 2019, los dos policías habrían utilizado su arma de servicio para disparar en medio de las manifestaciones y saqueos que se registraban en la Plaza Sucre.

Por estos hechos, el sargento M.A.A.G. fue condenado a tres años y un día por disparos injustificados, y a 600 días por lesiones graves, mientras que el capitán M.A.G.Y. también recibió tres años y un día por disparos injustificados.

La pena incluye la inhabilitación perpetua del ejercicio de derechos políticos, así como la de desempeñar cargos públicos mientras dure la condena.

En tanto, el tribunal absolvió a ambos funcionarios de los delitos de apremios ilegítimos y de falsificación de instrumento público.

Ambos tienen abonos para cumplir la libertad vigilada intensiva por el tiempo que han estado privados de libertad.

El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) actuó como querellante de la causa. La abogada de la sede, Javiera Tapia, acusó en radio ADN que "el fallo, pese a ser condenatorio, conduce a la impunidad, ya que no condena por apremios ilegítimos y, además, impone sanciones bajas que no resultan proporcionales a la gravedad de los hechos imputados y acreditados en el juicio".

Desde el INDH subrayaron que los disparos de uno de los acusados "causaron heridas de gravedad en seis personas" y que de acuerdo con los jueces "la conducta de ambos uniformados infringió el protocolo de uso de la fuerza del 4 de marzo de 2019, que estaba vigente al momento de las manifestaciones".

Fiscalía informó que se encuentra analizando el fallo ante la posibilidad de recurrirlo.