La NASA lanzó una nave espacial que tiene previsto impactar deliberadamente con un asteroide en otoño de 2022 para desviar su órbita, en una misión de prueba que no tiene precedentes y que forma parte de la estrategia de defensa planetaria de la agencia estadounidense.
La misión Prueba de Redireccionamiento de Asteroides Doble (DART, en sus siglas en inglés) despegó a las 22:21 hora local a bordo de un cohete SpaceX Falcon 9 desde la Base de la Fuerza Espacial en Vandenberg, California (EE.UU.).
Esta misión fue considerada "histórica" por la NASA, ya que el objetivo es chocar con un asteroide para desviarlo de su órbita con el fin de probar la tecnología que sería necesaria para evitar una posible colisión contra la Tierra.
La nave DART se dirigirá hacia el asteroide Didymos y su pequeña luna, Dimorphos, que será el blanco del impacto para alterar su órbita, que es inofensiva para la Tierra.
Según los cálculos de la NASA, Didymos y Dimorphos estarán relativamente cerca de la Tierra -a unos 11 millones de kilómetros- en el momento estimado del impacto.
Una vez que DART choque contra Dimorphos, la NASA examinará los cambios en su órbita alrededor de Didymos para evaluar si el método es viable para defender la Tierra, en caso de que en el futuro algún asteroide represente una amenaza para el planeta.
La colisión será registrada por un satélite del tamaño de un maletín llamado CubeSat, que ha sido desarrollado por la Agencia Espacial Italiana.
Ese cubículo se desplegará poco antes de la colisión para capturar imágenes y vídeos del impacto y de sus efectos en Dimorphos.
Los datos de la misión, según la NASA, se combinarán con los de la misión Hera, de la Agencia Espacial Europea y prevista entre 2024 y 2026 para analizar con más detalle los asteroides y el cráter que DART dejará en Dimorphos.