Dos ingenieros Enrique Sazié y Arturo Salazar se reunieron un 19 de agosto de 1922, en el campus de ingeniería de la Universidad de Chile, con el objetivo de hacer una prueba tecnológica.
Esa noche se transmitió, por primera vez, la voz humana por ondas radiales en el país. Tuvo un alcance de unos 100 kilómetros y en la ocasión unas 200 personas fueron testigos de este hito tecnológico, además de elaborar un transmisor, crearon un receptor el que fue ubicado en el hall central de las oficinas del diario El Mercurio en el centro de Santiago.
Al conmemorarse un siglo de la primera transmisión radial, Radio Usach convocó al físico teórico Andrés Gomberoff para conocer cómo funciona la ciencia tras la radio. “Hay tanta poesía en la ingeniería eléctrica, el micrófono es muy impresionante, no solo magnifica, es casi un instrumento musical, ¿Cómo funciona? Es un dispositivo electrónico con placas de metal que están electrificadas, estas son de diversos tamaños y cuando reciben la voz, se produce una vibración que es percibida por los cables y se transmite eléctricamente”, especifica.
“La vibración es lo que es percibido por el oído, las ondas electromagnéticas como las de radio son mucho más rápidas y nosotros solo logramos percibir las de 400 a 600 armstrong”, agrega el especialista.
Sobre esa primera transmisión de radio que se realizó hace 100 años, el científico explica. “Como dije, para transmitir información necesitamos ondas electromagnéticas. Ya se había realizado la primera transmisión en el mundo por el señor Hertz en 1888, está Marconi que es el padre de la radio, los ingenieros lograron replicar esa experiencia en nuestro país. Es más fácil la transmisión ahora por los satélites, el mundo ha cambiado mucho”, concluye.