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Según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), durante el primer semestre del 2024, en Chile se registraron solamente 70.336 nacimientos, lo que representa una caída del 22,9% en comparación al mismo periodo de 2023.

Sin embargo, la baja natalidad no es un problema que sólo afecta a Chile. Según un estudio de la Federación Internacional de la Sociedad de Fertilidad, para fines del siglo XXI la mayoría de las naciones no alcanzarán la tasa de fertilidad de 2,1 hijos por mujer.

Para profundizar en esta temática y todas sus aristas, la periodista Mirna Schindler conversó con Dante Castillo, sociólogo y académico de la Escuela de Psicología de la Usach. Al respecto, el especialista comentó que “este es un fenómeno multicausal. Hay factores que están relacionados a lo económico, a lo cultural y con los sistemas de producción. Esto se ve conjugado en también como estos factores se expresan en nuestro país”.

A lo anterior, el Director del Centro de Estudios CEIEF de la Facultad de Humanidades Usach agregó que “el llamado es que la opción de tener o no hijos sea una decisión, y que las condiciones sociales, económicas, sanitarias y educativas, permitan que las parejas decidan libremente tener o no tener hijos o hijas. Yo creo que Chile no tiene las condiciones óptimas para que aumente la fecundidad, lo que tenemos es una estructura que a veces hace que tomemos decisiones que responden a mecanismos que hay detrás y que son globales. Creemos que estamos decidiendo, pero hay un algoritmo social que está imponiéndonos ciertas decisiones”.

Respecto a las razones de eta tendencia a la baja de la natalidad en Chile, el profesional explica que lo que sucede es que “se conjugan dos cosas, por una parte tenemos una elite de clase alta que tiene una cultura de natalidad que se va postergando, es un patrón que se va repitiendo. Por otro lado, las clases bajas no tienen las condiciones económicas que permitan proyectar una mayor cantidad de hijos. Entonces es una tormenta perfecta”, sostuvo.

Cuáles son las proyecciones, el experto vaticina. “Lo más probable es que la tendencia irá bajando, seguramente ya estamos en el 1,2 hijos por mujer. Como sociedad se están construyendo viviendas cada vez más chicas, se instala entonces la idea de la familia reducida”, agregó.

Al finalizar, Castillo asegura que “el cambio cultural se ha acentuado, nuestra sociedad tiene estamentos muy acotados. En la población joven las tasas siguen a la baja, en Chile el embarazo adolescente es el más bajo del continente. Hay que ver si hay condiciones sociales y económicas que aceleren esta tendencia. La promesa a la juventud también juega en contra: calentamiento global, crisis climática, un futuro distópico, incierto”, concluyó.