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El 13 de diciembre de 1984 se publicó “La voz de los ‘80”, disco debut de la banda Los Prisioneros. Por entonces, fueron mil copias en casete con diez canciones de un trío de adolescentes provenientes de San Miguel que hacían rock, que “sonaba chileno” y que en sus letras hablaban de manera directa, sin tapujos.

A propósito de esta efeméride, en el programa “Frecuencia Pública” de Radio Usach, la periodista Daniela Figueroa conversó con el periodista Alejandro Tapia, autor de “Ya viene la fuerza. Los Prisioneros 1980 - 1986” (Club de Fans, 2024), la última publicación relativa a la banda que relata sus primeros años de conformación, la publicación de “La voz de los 80” (1984) y “Pateando Piedras” (1986).

“Me tomó cuatro años escribir este libro, porque lo que quería hacer era sumergirme en las profundidades de este océano que es la historia de Los Prisioneros, que siempre es una historia atractiva y difícil de abordar, porque más o menos todos los chilenos conocemos de dónde vienen sus hits, su separación, etc. Yo sentía que en la literatura prisionera, le hacía falta un texto que explorara o que tuviese más bien un enfoque musical, que se metiera más en el tema de la música y no necesariamente en las otras cosas que hemos sabido de ellos, como sus controversias. Yo quería contar una historia con mucho detalle”, comentó Tapia respecto a la génesis de esta publicación.

En cuanto al papel de Los Prisioneros en el desarrollo de la música popular chilena, según el autor de “Ya viene la fuerza”, “Los Prisioneros fueron la primera banda de pop contestatario y mira esa mezcla extraña, pop y contestatario, porque el pop uno no lo asocia a la rebeldía de América Latina. Si pensamos en los primeros discos de la banda, entre ‘La voz de los ‘80’ y ‘Corazones’, son cuatro discos absolutamente distintos entre sí y pensando en personajes como Charly, no sé si hay algo tan distinto entre ‘Clicks Modernos’ y ‘Piano Bar’ o ‘Cómo conseguir chicas’”.

Finalmente, Tapia hizo hincapié en la importancia de una comuna como San Miguel en la configuración de la banda nacional: “Me hace sentido que San Miguel fue fundamental en las experiencias de vida que tuvieron Jorge, Claudio y Miguel, porque San Miguel en esa época, a diferencia de otras comunas, era casi como una república independiente, donde se podía encontrar casa quintas en torno a Gran Avenida, por ejemplo. Entonces, no es como que alguno de los integrantes viviese en un barrio más acomodado que el otro”.